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Descripción
Existen dos tipos de hemorragias, las externas, en donde la sangre sale del cuerpo al exterior por un punto accesible, y las hemorragias internas, que no siempre son visibles y son inaccesibles de atender desde el punto de vista de los Primeros Auxilios. Siempre que exista una hemorragia debes acostar al accidentado, levantando un poco sus pies. Una vez hecho esto, y cuando ya hayas llamado a la ambulancia, realiza lo siguiente:
- Buscar una hemorragia externa, a veces oculta por la ropa, deteniéndola mediante compresión.
- Con el herido tendido se hace compresión local en el punto que sangra, bien con uno o dos dedos o con la palma de la mano, en función de la extensión de la herida.
- Si la hemorragia cesa, procederemos a colocar un vendaje compresivo.
- Si no se detiene, habrá que hacer compresión a distancia en los puntos que se indican en la imagen.
- Aplastar siempre la arteria o vena contra el hueso lo más cerca posible de la herida.
- No aflojar nunca el punto de compresión.
- Mantener al herido echado horizontalmente.